La Responsabilidad Social de las ONL (Organizaciones No Lucrativas) Los retos de la Responsabilidad Social: de la RSE a la RSO En poco tiempo, la práctica de la RSE ha pasado a ocupar un lugar preeminente tanto en los despachos del alta dirección empresarial como en el interés mediático. En medio de la vorágine de cambios en todas las esferas que rodean el mundo de las organizaciones, este enfoque de gestión ha ido adquiriendo cotas de presencia y un inusitado interés, surgiendo de la determinación por parte de ciertas empresas que han comprendido el gran potencial que puede aportar. Este es precisamente el hecho que más cabe resaltar: esta integración de las preocupaciones de la sociedad en las operaciones comerciales se ha desarrollado no tanto en espacios de negociación y presión sino en el corazón más estratégico del negocio de ciertas empresas que han tenido la visión según la cual su futuro pasaba por esta especial sensibilidad. Este nuevo sentido de la responsabilidad que las empresas adquieren voluntariamente ante la sociedad se está desarrollando fruto de la conciencia creciente de la comunidad, la evidencia de la insostenibilidad de ciertos modelos productivos, la fuerza de los clientes, la presión de organizaciones sociales y agencias públicas... Pero un análisis limitado en términos de ética y de presión de las partes no sería válida para todas las empresas. En la nueva economía, las empresas tienen la necesidad de gestionar sus activos intangibles, sus valores corporativos, la reputación de su marca, el talento de sus trabajadores, toda la dimensión material que fundamenta cada vez más los procesos de creación de valor. Es un nuevo contexto en que se hace evidente que las prácticas de RSE no son ninguna moda sino que se enmarcan en estrategias de alto nivel de las corporaciones. Hoy crear confianza entre las partes ha pasado a ser un requerimiento, hasta el punto que ciertos condicionantes éticos se van integrando en la cadena de abastecimiento, como años atrás sucedió con la Calidad. Organizaciones responsables Con respecto a las organizaciones sin ánimo de lucro, percibimos el riesgo de encontrarse atrapadas entre la observación de qué hacen las empresas y el deseo de verse directamente favorecidas. Aun así, su exigencia ética hacia los otras sectores podría girársele en contra si no muestra en este preciso instante una observancia rigurosa y aun diríamos adelantada de estas prácticas. La transparencia y responsabilidad son calidades a suponer en un sector que se mueve desde la no lucratividad y con una orientación en general al bien común. Una generalización de estos valores en el conjunto de la gran cantidad y diversidad de organizaciones existentes así como una aplicación firme y decidida por parte de las organizaciones que están en condiciones de marcar la línea mejorará su legitimidad. En un contexto en que, más allá de las simpatías y complicidades, la legitimidad se debe conquistar día a día por la vía de la aceptación social y la calidad. Los cambios de cultura organitzacional que se han ido gestando en las empresas son a menudo la cara amable de la economía, especialmente cuando las tendencias marcan una valoración creciente de los equipos de personas y de todos aquellos elementos intangibles de la producción que a menudo van muy asociados a las personas que integran la organización. En este contexto de rápida reconversión de modelos de gestión y normas de comportamiento, sería verdaderamente sorprendente que algunas empresas hicieran el sorpasso y dispusieran de una mayor valoración de sus equipos y una organización horizontal, una mayor calidad de todo el proceso, unas normas éticas y una RSE, etc., mientras que en los sectores público y social todavía encontráramos con abundancia organizaciones verticales, descapitalizadas intelectualmente, con unos procesos de poco valor añadido y un nulo trabajo alrededor de los compromisos éticos corporativos. Las entidades sin ánimo de lucro no sólo no deben considerar la RS una moda, sino que deben asumir también ciertos compromisos. La RS se debe reflexionar, se debe gestionar, y se debe comunicar. Esto es lo que ciudadanos, usuarios, socios, clientes, esperamos de las organizaciones de cualquier índole que están aquí y quieren continuar estando. Un reto de país Del mismo modo, las Administraciones Públicas apenas si están entrando: no sin una cierta dosis de perplejidad, el sector público ha observado desde fuera el desarrollo del fenómeno y se ha apresurado a buscar maneras de encajarlo en los respectivos postulados y formulación de las políticas públicas. Desde las órbitas del interés público (que compartimos tercer sector y sector público!) no podemos relegar la RS a una mera buena práctica: bien al contrario, hace falta encontrar el valor esencial que tiene y que se vincula íntimamente al fortalecimiento de la comunidad y la construcción del país. Bajo este prisma es fundamental concebir que la RS no conforma sólo un paradigma de las empresas sino de todas las organizaciones. Tanto la propia Administración como las Organizaciones No Lucrativas tienen un gran recorrido a hacer en su compromiso, y este será uno de los retos de los próximos años para el que hará falta un fuerte liderazgo, para afrontar retos de transparencia, capacidad relacional, impacto en la sostenibilidad, compra ética... Por ello, junto a la RSE (de la Empresa) podemos hablar de la RSO (de las Organizaciones) y de la RSA (de las Administraciones), cada una con su especificidad. Entendida como un desarrollo ad hoc para el propio sector. Y no corresponden actitudes de poca visión limitadas a como captar recursos de las empresas. La RS es un enfoque propio de una sociedad compleja, que responde a demandas diversas y nos abre a retos diversos. Nos debe permitir mejorar la governanza global y de cada territorio, como promueve las Naciones Unidas; nos debe servir para desarrollar una economía competitiva basada en el conocimiento y que mantenga la cohesión social, como pretende la UE; y es una de las dimensiones que nos debe servir por definir el nuevo contrato social y la sociedad del bienestar. Y al fin y al cabo es un elemento altamente significativo para un proyecto de construcción de país, en la medida que tiene esta capacidad de alinear, desde el compromiso y los valores, la visión de la sostenibilidad ecológica, la sostenibilidad y el desarrollo económico, y el desarrollo y la cohesión social. Josep Maria Canyelles Promotor de www.responsabilidadglobal.com (cast.) y www.responsabilitatglobal.com (cat.) jmcanyelles@collaboratio.net 670 600 223 Si han recibido este correo por error, o no quieren recibir más, rogamos cliquen aquí: info@collaboratio.net Josep Maria Canyelles ha dirigido el Instituto Catalán del Voluntariado y actualmente promueve la RS y la gestión estratégica de las organizaciones. Colabora en distintas organizaciones e instituciones: Associación para las Naciones Unidas (responsable de RSE) Fundación Pere Tarrés (Univ.Ramon Llull) Grec · Resolución de Conflictos Accid. As. Cat. de Contabilidad y Dirección Univ.Oberta de Catalunya, Univ.de Girona, Univ. Cat.d’Estiu, Revista Management & Empresa de la Univ.de Barcelona Instituto de Estrategia Entender porque es interesante para las empresas: Os enviamos una presentación sobre las ventajas competitivas de disponer de una política de Responsabilidad Social para una empresa AQUÍ “La RSE sólo se puede entender como consecuencia de una nueva concepción de las relaciones económicas y de las maneras como se crea valor en la Sociedad del Conocimiento”. JM Canyelles. Comparecencia Subcomisión RSC Congreso Diputados. Mayo’05 RSO Misión Promover la Responsabilidad de las Empresas y las Organizaciones hacia la Sociedad, trabajando con ellas para ayudar a incorporarla en sus operaciones y estrategias, de manera que mejoren sus respectivos negocios, actuaciones o políticas públicas y su impacto social, y creen así valor para todas las partes contribuyendo al desarrollo sostenible tanto de la organización como de la comunidad. Creen que sería necesario un foro de debate en estos aspectos, algún seminario o curso de formación adecuado para las ONL, herramientas, otras oportunidades de hablar de la RSO...? Opinar Administración Empresa Tercer Sector Cómo podemos profundizar en las zonas de relación, en las fronteras, para acentuar la creación de valor, la creatividad, la innovación, el interés compartido y social... “El voluntariado de empresa es una oportunidad para crear ‘capital social’ a la vez que remueve proactivamente sus equipos humanos internos”. JM Canyelles. Conferencia para el Foro de Reputación Corporativa. Abril’03 “La Responsabilidad Social será estratégica o no será”. JM Canyelles. Conferencia Colegio Empresistas. Dic’04 “El tercer sector debe comprender la RSE e integrarla, no solo intentar "sacar provecho". Urge un "cambio de chip" ya que prácticas como el mecenazgo están cambiando hacia nuevos modelos más allá de la mera filantropía y más basados en colaboraciones muy estratégicas». JM Canyelles. Congreso Andaluz del Voluntariado. Feb’05 “El futuro de la dimensión RS está en la visión relacional: allá donde se articulan las perspectivas de las partes interesadas encontramos los focos de innovación, de responsabilidad creativa y de activación de procesos de cambio; es donde una empresa puede avanzar en el desarrollo relacional de su estrategia de negocio”. JM Canyelles. Comunicación Congreso Contabilidad y Dirección. Mayo’05 Estrategia Colaborativa Responsabilidad Social Cuadro de Mando Integral para ONL